La textura, o distribución del tamaño de las partículas minerales (o su volumen de poros asociado), es una de las medidas más importantes del suelo, ya que las partículas finas tienen una superficie por unidad de masa o volumen mucho mayor que las partículas gruesas. Por lo tanto, una pequeña cantidad de arcilla fina y limo será mucho más importante en las reacciones químicas, la liberación de nutrientes, la retención de humedad, etc., que un gran volumen de grava o arena gruesa. El kit para medir la textura del suelo incluye un agitador de alta velocidad, un hidrómetro 152H con rango de -5 a 60 g/l, una probeta Bouyoucos de 1205 ml y una varilla de acero inoxidable. El agitador de alta velocidad funciona a más de 10 000 rpm e incluye un vaso de dispersión, una paleta de agitación y encendido automático al posicionar el recipiente.